. . . donde la discreción y la prudencia no tienen cabida y las palabras adquieren la dimensión justa de lo que cada cual esté dispuesto a percibir.
Diario de un novelista
El lápiz perfectamente afilado; el papel, persuasivo; la silla, fantástica; y una buena luz, y nada que escribir. John Steinbeck, en 'Diario de un novelista' *Lienzo: Adam Martinakis ver más